Rayuelas y laberintos para los niños y niñas en el Heller

La especialista en juegos étnicos, Stella Maris Ferrarese, quiere que los niños y niñas jueguen, y disfruten moviendo el cuerpo y desarrollando la creatividad e imaginación. En ese plan, la creadora del Museo del Juguete étnico “Allel Kuzen” de Neuquén, pintó rayuelas y laberintos de colores en el ingreso a la Guardia y el Jardín Maternal del Hospital Dr. Horacio Heller.

Me emocioné cuando vi a los chicos del Jardín, ahí pude ver lo que es el disfrute de los niños al salir y encontrarse con un juego pintado en el piso, explorando, o poder rayar un pizarrón pintado en la pared”, reflexionó Stella Maris sobre el uso que le dan los más pequeños a las rayuelas y laberintos que pintó en el hospital.

Además de las intervenciones que hizo en el ingreso a la Guardia y el Jardín Maternal, la profesora de educación física jubilada y estudiosa de los juegos desde hace 30 años, donó juguetes al sector de Internación pediátrica. Estas creaciones –que elabora junto a sus colaboradores Marisa, Blanca y Fabián- tienen la particularidad de recuperar la historia y cultura de los pueblos originarios de América, África, también del pueblo romaní y “otros que sufren o han sufrido prejuicios étnicos”.

Son juguetes del mismo estilo que tenemos en el Museo, como por ejemplo un puente gallego, un tipo de balero, el emboque, entre otros”, aclara Stella Maris sobre las donaciones que hizo para los niños y niñas internados. Ella, además de ser vecina y atenderse muchas veces en el hospital, tiene un vínculo de amistad con la familia Heller.

Contó además que en el Museo -ubicado en la Casilda 417 del barrio San Lorenzo Sur-, cuentan actualmente con 523 piezas elaboradas con diferentes materiales (como madera y hueso por ejemplo) y diseños. Cada una de ellas es producto de una investigación antropológica de mucho tiempo y dedicación por parte de Stella Maris y su equipo de trabajo.

“La base del Museo son juguetes y juegos de los pueblos indígenas de América, que forman parte de nuestra propuesta de rescate y puesta en valor, ya que hace algo de más de 500 años se taparon o modificaron en un proceso de imposición de culturas ajenas con supresión de la propia”, indica la web del Museo (www.museodeljugueteetnico.com).

¿Uno de los objetivos de tu trabajo es la reivindicación del juego en los niños y niñas?


- Si, volver a jugar, porque entre las exigencias de los padres, el celular, la computadora, fueron cambiando a los niños, eso provoca mucha obesidad, perdida de motricidad. Los juguetes que proponemos tienen que ver con el contacto, la imaginación, la creatividad, invitan a moverse por el espacio. Los niños lo que más reconocen son las rayuelas, intentan inmediatamente jugar.

¿Cuál es tu propósito?


- Que la infancia tenga alegría, jueguen, muevan el cuerpo. Porque si bien la tecnología contribuye a un desarrollo, es fijo, no desarrollan la creatividad, la imaginación. Por eso es interesante mostrar una alternativa. No decir esto no, pero mostrar una alternativa.